miércoles, 26 de junio de 2013

Soy moñas y no me arrepiento.

Entre otras muchas cosas, ella es mi apoyo. La que me mantiene de pie cuando me voy a caer, por problemas familiares, preocupaciones de becas, exámenes que salen horribles... Todo lo aguanta. Siempre me ayuda. Siempre me sonríe y me dice que todo va a salir bien. Y aunque sea sólo en ese pequeño momento en que sonríe, yo me lo creo. Esa sonrisa me hace creer. Y me encanta que sea ella. Hace que quiera ser mejor alumno, mejor amigo, mejor novio, mejor persona. ¿Cómo puede alguien influir tan positivamente en una vida? Y lo mejor es que no se lo cree. Si yo pudiese mostrar mis pensamientos, en lugar de simplemente decirlos o escribirlos...
Y yo intento apoyarla siempre. Intento hacerla sonreír, porque este mundo sin su sonrisa perdería la mayor parte de su encanto, no sería un lugar bonito donde vivir. Intento que nunca esté mal, porque es una de esas personas que no merecen estar mal, nunca jamás. Y cuando no puedo conseguirlo, al menos puedo intentar hacer el tonto o dar abrazos. Eso se me da bien :) y quererla. En eso soy el mejor del mundo, puedo jurarlo. Pero no tiene mérito, porque es tan fácil... Lo difícil sería no sentir amor hacia una persona tan bonita en todos los sentidos. 

Verás mañana cuando te vea. De mil besos, abrazos y caricias no te salva nadie ;)

No hay comentarios:

Publicar un comentario